El expresidente Donald Trump salió este jueves de la cárcel de Atlanta, en Georgia, pocos minutos después de haber ingresado y tras haber aceptado pagar los 200 mil dólares que sus abogados acordaron con la fiscalía.
Las autoridades penitenciarias tomaron las huellas dactilares y una fotografía policial del republicano, acusado de 13 delitos por haber intentado revertir el resultado de las elecciones presidenciales de 2020 en Georgia.
Trump abandonó la prisión del condado de Fulton en un convoy de vehículos blindados escoltado por el Servicio Secreto, que se encarga de la seguridad del exmandatario.
A su llegada al aeropuerto en Georgia, Trump se dirigió a la prensa para reiterar sus acusaciones de intromisión electoral por parte del gobierno de Joe Biden.
“Realmente creo que este es un día muy triste para América, esto nunca tuvo que haber sucedido (…) No hice nada malo y todos lo saben”, aseguró.
El republicano aseguró que tiene derecho de reclamar las irregularidades en proceso electoral.
“La elección fue amañada y robada (…) tenemos todo el derecho de desafiar una elección que creo fue deshonesta”, añadió.
Esta es la cuarta imputación penal de Trump, pero la primera en que se le cita en una cárcel y que se le toma una foto policial. En las tres anteriores, había comparecido en diferentes juzgados para la lectura de cargos.
La fiscal de Fulton, Fani Willis, acusa al republicano de 13 delitos por intentar revertir los resultados electorales en Georgia, donde Trump perdió por un estrecho margen contra el actual presidente, el demócrata Joe Biden.
El principal delito que se le imputa en el estado de Georgia es el de violar la ley de asociación delictiva (RICO, en inglés).
De ser declarado culpable de todos los cargos, el expresidente republicano podría ser condenado a hasta 76 años y seis meses de cárcel.
INFORMACIÓN DE EFE