La poca infraestructura, personal, equipo mobiliario y posiblemente vehículos que dispone el Partido de la Revolución Democrática en Tamaulipas empezó a requerirse.
Incluso, algunos edificios que sirvieron como comités municipales, fueron asegurados por un comisario del Instituto Nacional Electoral en Tamaulipas.
Para el INE, el PRD dejó de ser un partido político y por consecuencia, no podrá participar más en elecciones federales ni locales. Se lo acabaron.
Aunque viejos militantes que en su momento presidieron el Comité Ejecutivo Estatal todavía se identifican con esa corriente.
Difícil que personajes como PEDRO ALONSO PÉREZ, JULIO CÉSAR MARTÍNEZ INFANTE, RAFAEL RODRÍGUEZ SEGURA, ALEJANDRO CASTREJÓN BRITO y otros, se olviden de un partido que les permitió en su momento, tener una representatividad.
¿De dónde proviene la caída o el inicio de la extinción del PRD en Tamaulipas? Más de uno coincide que desde los tiempos de MIGUEL ÁNGEL ALMARAZ, ahora alcalde de Río Bravo por las siglas del Partido Acción Nacional, luego de estar en la cárcel seis años.
Desde que ALMARAZ tomó las riendas del PRD en el Estado, brotaron inconformidades y se empezaron a formar otros grupos al interior de dicho partido político, que por su disputa se les denominó tribus o corrientes.
Desde luego que no todos estaban contentos con la llegada de MIGUEL ÁNGEL ALMARAZ al PRD, porque de antemano, sabían del futuro que tendría el perredismo en Tamaulipas.
Y efectivamente. Cuánta razón tenían. Hoy el PRD no existe en Tamaulipas y lo poco que queda, el INE se encargará de desaparecer en un periodo que podría llevarse años.
Después de presidir el CEE del PRD MIGUEL ÁNGEL ALMARAZ, el partido se fraccionó en grupos, corrientes y expresiones.
Y aunque hubo intentos de recuperar lo perdido, por quienes pudiera decirse, fueron fundadores y fuertes impulsores del perredismo en Tamaulipas, finalmente no se logró.
El último intento por recuperar terreno perdido, fue cuando al igual que el PRI se unió al Partido Acción Nacional en la elección del 2022.
Fue su última oportunidad, pero al igual que al PRI, incluso, al PAN, la experiencia resultó un nuevo fracaso.
A estas alturas el PRD quedará para la historia político – electoral, a menos de que alguno de los que todavía se identifican con esa corriente, decidiera trabajar de nuevo por recuperar el registro como partido político nacional. En fin.