Editoriales

Una postura que refuerza la esperanza

David Ed Castellanos Terán
@dect1608

Una postura que refuerza la esperanza

En un entorno donde el periodismo enfrenta desafíos inéditos, el gobernador Américo Villarreal Anaya marcó un punto crucial al conmemorar el Día del Periodista en Tamaulipas, al  poner sobre la mesa el compromiso de su gobierno con la transparencia, la libertad de expresión y el respeto irrestricto al quehacer periodístico.

La afirmación del gobernador de que su administración “no le teme a la verdad” no puede tomarse a la ligera. Es una declaración que desafía no solo los retos internos de su gobierno, sino también el contexto nacional, donde los ataques a periodistas y la desinformación por algunos irresponsables han puesto en jaque la credibilidad de las instituciones.

Este mensaje, pronunciado frente a periodistas y representantes de medios, resuena con fuerza en un estado como Tamaulipas, donde la labor informativa a menudo se desarrolla bajo condiciones adversas como en todo México.

El respeto a la prensa, como señaló Villarreal, no es un acto de benevolencia gubernamental, sino una obligación democrática. Sin embargo, las palabras necesitan traducirse en hechos, y la entrega simbólica de tarjetas del IMSS-Bienestar a periodistas es un avance concreto, pero es solo un paso en un camino que debe garantizar no solo la seguridad social, sino también la integridad física y profesional de quienes se dedican a esta profesión esencial.

Por su parte, el coordinador general de Comunicación Social, Francisco Cuéllar Cardona, asumió un tono crítico y firme. Su mensaje subraya un entendimiento claro: el periodismo no es, ni debe ser, un aplauso constante al poder, pero tampoco un instrumento de odio y mentira.

Este equilibrio, entre la crítica constructiva y la ética informativa, es la clave para fortalecer la democracia y combatir el veneno de las noticias falsas y la calumnia.

Es innegable que el reto está en ambos frentes: desde el gobierno, garantizar el respeto y la seguridad de los periodistas; desde los medios, elevar la práctica periodística mediante un compromiso férreo con la verdad, el rigor y la ética. La labor periodística no puede ser rehén de intereses, pero tampoco puede ser un vehículo para manipular conciencias.

La presencia de miembros del gabinete estatal en este evento, interactuando directamente con los comunicadores, es un gesto simbólico que busca cerrar la brecha entre quienes informan y quienes ejecutan políticas públicas. La titular de la Secretaría de Educación, Lucía Aime Castillo Pastor, fue de las personalidades más saludadas y abrazadas por los representantes del periodismo tamaulipeco, pero, la verdadera prueba de esta interacción no está en las ceremonias, sino en los hechos que se derivan de ellas, asi que Lucía y todos sus compañeros deben captar el mensaje de Cuellar y del mismo jefe del ejecutivo estatal. La verdad por el bien de Tamaulipas; la verdad por encima de intereses personales, aunque haya a quien le cueste.

En la intimidad… La comida con medios  permitió observar un lado más cercano de las figuras clave del estado. Destacó la presencia del rector MVZ Dámaso Leonardo Anaya Alvarado, un hombre cuya sencillez y accesibilidad contrasta con su peso como operador político.

Rodeado de colegas que se acercaron a saludarlo, el rector demostró no solo su perfil humano, sino también su habilidad para generar conexiones genuinas.

En un ambiente donde los reflectores suelen girar hacia las figuras políticas más prominentes, Anaya Alvarado reafirmó su lugar como un pilar discreto pero sólido en la transformación de Tamaulipas. Su participación en este encuentro refleja no solo su compromiso con la máxima casa de estudios, sino también su capacidad para actuar como un puente entre sectores clave de la sociedad tamaulipeca.

El periodismo, como la política, es un acto de conexión y verdad. Que esas virtudes se fortalezcan es el verdadero desafío de este tiempo.

davidcastellanost@hotmail.com
@dect1608