Erik Huerta / TN
Altamira, Tam.- La siembra de soya en los ejidos de Altamira se encuentra en una severa crisis debido a las altas temperaturas y la prolongada falta de lluvias, factores que amenazan con desaparecer esta actividad agrícola en uno de los municipios que históricamente fue líder en producción.
De acuerdo con José Enríquez Reyes, presidente del Comité Campesino, actualmente sólo se contempla la siembra de 20 mil hectáreas, cifra muy por debajo de las más de 38 mil que se cultivaban hace una década.
Además del clima, el bajo precio de la tonelada también ha mermado el interés de los productores.
“Sembrar una hectárea de soya cuesta alrededor de 10 mil pesos, pero la tonelada se paga apenas en 5 mil, cuando antes se cotizaba en 7 mil pesos”, explicó Enríquez Reyes.
Durante el año pasado se sembraron 18 mil hectáreas, y el ciclo productivo logró salvarse gracias a las lluvias provocadas por la tormenta tropical Alberto, sin embargo, la falta de humedad en esta temporada ha reducido drásticamente los rendimientos.
“Estamos hablando que la producción por hectárea es de una tonelada a tonelada y media; antes se alcanzaban hasta cinco toneladas. Eso habla de la baja producción que se obtiene por la falta de humedad”, lamentó el líder campesino.
Pese a estas condiciones adversas, los agricultores no abandonan el campo, aunque muchos optan por cultivos más rentables o de mayor demanda.
Dijo que un productor del sector social siembra entre 10 y 15 hectáreas, dependiendo de las condiciones de la tierra.
“Dependemos de la lluvia. Ya no llueve en los tiempos previstos; en los últimos años, se adelantan o se atrasan y eso nos altera los ciclos de siembra”, concluyó Enríquez Reyes.