Este lunes, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció nuevas sanciones contra “Los Chapitos”, la facción más violenta del Cártel de Sinaloa, encabezada por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán. La medida, ejecutada por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), incluye el congelamiento de bienes, el bloqueo de redes financieras y sanciones a socios comerciales en México.
“Los Chapitos son una facción poderosa e hiperviolenta del Cártel de Sinaloa, líder del tráfico de fentanilo a Estados Unidos”, afirmó el secretario del Tesoro, Scott Bessent. “Estamos cumpliendo el mandato del presidente Trump de eliminar por completo los cárteles de la droga y combatir a líderes violentos como los hijos de ‘El Chapo’”.
Los principales objetivos de la sanción son Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, prófugos con recompensas de hasta 10 millones de dólares por su captura. Sus hermanos, Ovidio y Joaquín Guzmán López, se encuentran detenidos en Estados Unidos, mientras que Iván y Alfredo continúan operando desde México.
La OFAC detalló que esta facción ha expandido su control sobre la producción de fentanilo en Sinaloa, operando laboratorios clandestinos y distribuyendo la droga en píldoras falsificadas que han provocado miles de muertes por sobredosis en territorio estadounidense.
Del narcotráfico al terrorismo
Además del tráfico de drogas, las autoridades estadounidenses vinculan a Los Chapitos con actos de extrema violencia. Entre ellos, el asesinato del exmarine Nicholas Quets en octubre de 2024 en Sonora. Por estos vínculos, el Departamento de Estado designó a Iván y Alfredo Guzmán como Terroristas Globales Especialmente Designados (SDGT), y al grupo como Organización Terrorista Extranjera (FTO).
La sanción incluye también a una decena de empresas vinculadas al grupo, localizadas principalmente en Mazatlán, Sinaloa. Entre ellas se encuentran Beach Y Marina, Club Playa Real, Carpe Diem Spa, y Comercializadora Copado, todas acusadas de facilitar operaciones de narcotráfico, extorsión, secuestro y lavado de dinero.
Estas acciones se sustentan en la Orden Ejecutiva 14059, que combate el tráfico de drogas sintéticas, y en la OE 13224, orientada a neutralizar amenazas terroristas.
Violencia sin freno
Desde septiembre de 2024, se han reportado más de 600 muertes en Sinaloa por enfrentamientos entre Los Chapitos y grupos rivales. Iván Guzmán ha sido señalado como el cabecilla más violento, responsable de ataques tanto a enemigos como a autoridades. Su hermano Alfredo ha sido acusado de participar en actos de tortura.
Las autoridades estadounidenses reiteran que, aunque operan de forma autónoma, Iván y Alfredo actúan dentro de la estructura criminal heredada por su padre, “El Chapo” Guzmán.
