Las labores de rescate continúan entre escombros y lodo; al menos 11 niñas y un guía de campamento siguen desaparecidos
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este domingo una declaración de emergencia por desastre natural para el estado de Texas, tras las devastadoras inundaciones que han dejado al menos 78 personas muertas y decenas de desaparecidos. La decisión busca agilizar el envío de recursos federales y asistencia inmediata para atender a las comunidades afectadas.
“Estas familias están sobrellevando una tragedia inimaginable. Se han perdido muchas vidas y muchos más siguen desaparecidos”, escribió el mandatario en su red Truth Social.
Desesperada búsqueda en el “callejón de inundaciones repentinas”
Las inundaciones, que arrasaron el centro de Texas durante la madrugada del sábado, han dejado una estela de destrucción en múltiples condados, especialmente en el condado Kerr, donde el número de fallecidos ascendió a 59, según el jefe policial Larry Leitha. Al menos 21 de las víctimas eran niños.
Las operaciones de rescate continúan en condiciones extremadamente difíciles, debido al terreno montañoso, árboles derribados, autos volcados y lodo espeso. Leitha aseguró que las labores no cesarán “hasta que todos sean encontrados”.
Otras muertes se reportaron en los condados de Travis (4 víctimas), Burnet (3) y Kendall (1). Aún no hay una cifra oficial de desaparecidos, pero se sabe que entre ellos hay 11 niñas y un guía del Campamento Mystic, un centro de verano cristiano que fue severamente golpeado por la crecida.
Historias de supervivencia entre el caos
Los relatos de los sobrevivientes son desgarradores. Algunos lograron salvarse aferrándose a árboles durante horas mientras el agua arrastraba vehículos y escombros. Otros escaparon a los áticos de sus casas, orando para que el nivel del agua no subiera más.
En el Campamento Mystic, una cabaña repleta de niñas logró cruzar un puente con el agua hasta las rodillas, sostenidas por una cuerda que les tendieron los rescatistas. Una de las víctimas confirmadas es una niña de 8 años originaria de Mountain Brook, Alabama, quien participaba en el campamento.
Los habitantes de la zona conocían el riesgo: la región es conocida como el “callejón de inundaciones repentinas”, pero incluso con las alertas emitidas, la fuerza del agua en plena noche tomó por sorpresa a cientos de residentes y campistas.
INFORMACION DE EFE Y AP