El exbeisbolista mexicano Fernando “Toro” Valenzuela, considerado uno de los mejores atletas en la historia de México, falleció a los 63 años. El deceso ocurrió en un hospital de California, donde se encontraba internado desde finales de septiembre.
Nacido el 1 de noviembre de 1960 en Etchohuaquila, Sonora, Valenzuela fue el menor de once hermanos. Desde su infancia mostró un talento excepcional para el béisbol, lo que lo llevó a convertirse en una de las figuras más importantes del deporte a nivel mundial.
Valenzuela jugó durante 17 temporadas en las Grandes Ligas, destacando principalmente con los Dodgers de Los Ángeles. Firmado por la franquicia en 1979, debutó un año después y rápidamente desató la “Fernandomanía”, un fenómeno en el que el joven lanzador mexicano se convirtió en una superestrella de la Major League Baseball (MLB).
Con los Dodgers, Valenzuela registró una marca de 141 victorias y 116 derrotas, con un promedio de carreras limpias permitidas de 3.31 en 331 juegos. Su actuación más destacada llegó en 1981, cuando ganó el premio al Novato del Año y el prestigioso Cy Young, con tan solo 20 años de edad. Ese mismo año, fue pieza clave para que los Dodgers ganaran la Serie Mundial.
Durante su carrera, asistió a seis Juegos de Estrellas consecutivos (1981-1986) y fue galardonado con dos Bates de Plata (1981 y 1983), reconociendo su habilidad como bateador, algo inusual para un lanzador. También formó parte de equipos como los California Angels, Baltimore Orioles, Philadelphia Phillies, San Diego Padres y St. Louis Cardinals.
Valenzuela también dejó huella en el béisbol mexicano, jugando en equipos como los Mayos de Navojoa, Naranjeros de Hermosillo y Águilas de Mexicali. En 2006, lanzó su último partido profesional en México, a los 44 años.
Además de su carrera como jugador, Valenzuela continuó ligado al béisbol como mánager de la selección mexicana en los Clásicos Mundiales de Béisbol y propietario de los Tigres de Quintana Roo desde 2017.
El 11 de agosto de 2023, los Dodgers inmortalizaron el legado de Valenzuela al retirar su emblemático número 34, un honor que lo convirtió en el primer mexicano en recibir esta distinción en la MLB. Su número ahora cuelga en el Dodger Stadium junto a otras leyendas del equipo, como Sandy Koufax y Jackie Robinson.
Fernando Valenzuela deja un legado imborrable en el deporte, no solo como jugador, sino como ícono cultural para generaciones de mexicanos y fanáticos del béisbol en todo el mundo.
Información de López-Dóriga Digital
