El mundo del periodismo deportivo está de luto tras el fallecimiento de Andre Marín, quien murió este día a los 52 años. Con una carrera destacada y una trayectoria que dejó huella en el deporte mexicano, Marín se consolidó como un referente indiscutible en la comunicación deportiva. Su partida deja un vacío en la industria y un legado que servirá de inspiración para futuras generaciones.
Marín fue un pilar fundamental en medios como Azteca Deportes, donde jugó un papel clave en el inicio del proyecto televisivo, así como en Fox Sports, donde brilló en el programa ‘La Última Palabra’. También participó como analista en TUDN y fue columnista en mediotiempo, donde compartía su opinión en la videocolumna ‘La Autopsia’.
Los inicios de una carrera legendaria
Desde joven, Andre Marín mostró un interés genuino por el periodismo deportivo. En una entrevista con mediotiempo, Marín confesó que el programa ‘Dos en el área’, conducido por José Luis Lamadrid y Rafa Puente, fue crucial para su decisión de seguir una carrera en el deporte. A los 14 años, luego de insistentes llamadas al programa, fue invitado a visitar la cabina, lo que marcó el inicio de su trayectoria.
Posteriormente, ingresó a Imevisión y se unió al equipo que coordinaba la cobertura del fútbol europeo, en la época dorada de Hugo Sánchez en el Real Madrid. Su trabajo en el extranjero y su pasión por el fútbol lo llevaron a cubrir los pasos de la Selección Mexicana durante la gestión del técnico César Luis Menotti.
La transformación de Andre Marín en un ícono del periodismo deportivo
A partir de la Copa del Mundo en Alemania 2006, Andre Marín dejó de lado su rol en las calles como reportero para pasar a los foros de televisión, donde su figura se consolidó como una de las más influyentes del periodismo deportivo en México. Marín fue una pieza fundamental en la transición del periodismo deportivo mexicano, impulsado inicialmente por su mentor, José Ramón Fernández, y a lo largo de los años, su estilo analítico y directo lo hizo ganar el respeto y admiración de colegas y aficionados por igual.
“No me arrepiento de nada, ha sido una profesión maravillosa y yo la abracé”, comentó en una de sus últimas entrevistas. Estas palabras reflejan la pasión con la que vivió su profesión, y su nombre quedará grabado en la historia del periodismo deportivo mexicano.
Descanse en paz, Andre Marín Puig.
INFORMACIÓN DE MEDIO TIEMPO
