La serie está cada vez más inclinada para Los Ángeles. Los Dodgers volvieron a derrotar a los Yankees en su propia casa con un marcador de 4-2, y el Yankee Stadium, generalmente intimidante, se quedó en silencio gracias al dominio de Walker Buehler y a la potente ofensiva de Freddie Freeman. Esta victoria coloca a los Dodgers a solo un triunfo de su octavo Trofeo del Comisionado, una oportunidad que podría concretarse en el próximo juego en el mismísimo Bronx.
Freddie Freeman, quien ha sido una constante amenaza para la defensa neoyorquina, arrancó el partido con un poderoso jonrón en la primera entrada, que le permitió a su equipo adelantarse 2-0. Este cuadrangular no solo fue crucial para el resultado, sino que también significó un hito histórico: Freeman empató el récord de cinco home runs consecutivos en una Serie Mundial, una marca compartida con George Springer.
Walker Buehler, por su parte, cumplió una actuación estelar desde la lomita, permitiendo solo dos hits y recetando cinco ponches en cinco entradas de trabajo. El apoyo de la ofensiva no se hizo esperar, y en la tercera entrada, Mookie Betts conectó un sencillo que impulsó una carrera más, ampliando la ventaja a 3-0. Para la sexta entrada, un sencillo de Kiké Hernández impulsó otra anotación de Gavin Lux, y los Dodgers ya contaban con una sólida ventaja de 4-0.
Aunque los Yankees intentaron responder en la última entrada con un jonrón de Alex Verdugo que redujo el marcador a 4-2, el esfuerzo fue insuficiente. Con dos outs en contra, Gleyber Torres intentó revivir la ofensiva de los neoyorquinos, pero su batazo terminó en manos de los Dodgers, sellando la tercera victoria consecutiva para Los Ángeles.
Los Dodgers están a un juego de alcanzar la gloria, y lo harán, si consiguen el triunfo, en el mismísimo Yankee Stadium, en una noche que promete ser histórica para el béisbol.
INFORMACIÓN DE FOX SPORTS