El delantero mexicano recordó con emoción a su excompañero, fallecido días antes en un accidente automovilístico
Antes de que rodara el balón en la gran final de la Copa Oro 2025 entre México y Estados Unidos, el delantero Raúl Jiménez protagonizó un emotivo homenaje en memoria de Diogo Jota, su excompañero en el Wolverhampton, quien falleció el pasado jueves tras un accidente de auto en la provincia española de Zamora, sobre el kilómetro 65 de la autopista A-52.
Durante la ceremonia previa al arranque del encuentro, mientras ambos equipos salían al terreno de juego, Jiménez sorprendió al portar una camiseta distinta a la habitual: en lugar de su número habitual, llevaba el dorsal 20 con el nombre de Jota, acompañado de la leyenda “QEPD”. Un gesto silencioso, pero cargado de simbolismo, que fue aplaudido tanto por sus compañeros como por los asistentes en las gradas.
¡Raúl lo empató en Houston! 😎 Y el festejo… 😍
Este es para ti, Diogo. ❤️#PorMéxicoTodo pic.twitter.com/l3VkBm5iQT
— Selección Nacional (@miseleccionmx) July 6, 2025
La relación entre Jiménez y Jota trascendía lo deportivo. Jugaron juntos varias temporadas en la Premier League con los Wolves, donde formaron una dupla temida por las defensas rivales. En días recientes, el atacante mexicano compartió públicamente que mantenían una amistad sólida fuera de la cancha.
“Era un gran amigo, alguien muy cercano. Compartimos muchos momentos importantes y manteníamos contacto constante”, expresó Jiménez en declaraciones previas.
Un gol con dedicatoria especial
El homenaje no terminó con la camiseta. Ya durante el partido, tras anotar el gol del empate ante Estados Unidos, Jiménez replicó el característico festejo de su amigo portugués: se sentó en el césped y simuló jugar videojuegos, gesto habitual de Jota cada vez que marcaba.
Después del gol, el delantero del Fulham alzó la camiseta con el nombre de Jota ante las cámaras, sellando así su tributo con una imagen que rápidamente se volvió viral. Semanas atrás, Jiménez también había manifestado su dolor en redes sociales al enterarse de la noticia, con un mensaje breve pero contundente: “Te recordaré siempre, hermano.”
El emotivo homenaje de Raúl Jiménez trascendió lo deportivo y mostró la cara más humana del fútbol: la de la amistad, la memoria y el respeto.
