Editoriales

Robos, explosiones y ejecuciones en Tamaulipas | David Ed Castellanos Terán

El gobernador Américo Villarreal Anaya, se reunió con el equipo de la Mesa de Coordinación para la Construcción de La Paz, junto al Ingeniero Antonio Varela Flores, secretario de Desarrollo Rural de Tamaulipas, en donde acordaron reforzar la vigilancia en los puntos de revisión sanitaria para evitar el robo de ganado. De los Oxxos y el freno de Grupo Walmart a sus inversiones en la frontera tamaulipeca, otro día hablamos.

El jefe del ejecutivo estatal sostuvo durante la reunión que siguen trabajando en estrecha coordinación con las fuerzas de seguridad federales y estatales para que su querido Tamaulipas continúe consolidándose como una entidad segura.

Y es que estadísticamente las cosas le han favorecido a Villarreal, sus indicadores muestran que VA en el camino correcto.

Precisamente, en la zona sur del estado se habían robado al menos 155 cabezas de ganado, con un valor estimado en los 6 millones de pesos.

Esa noticia volvió locos a los cuerpos de seguridad, obligándolos a  activar un protocolo interestatal con las entidades vecinas para recuperarse del vacío que la delincuencia había hecho en la zona metropolitana de Tampico, se trataba ni más ni menos que de 155 cabezas de ganado, entre machos y hembras que le  robaron al rancho  “Corrales El Triunfo”, ubicado por la brecha de Corpus Christi en el municipio de Altamira.

Afortunadamente, fueron aseguradas por las autoridades locales en el Estado de México.

El cuantioso robo de semovientes ocurrió durante la noche del sábado 27 y madrugada del domingo 28 de julio, cuando los hampones arribaron a los corrales, amarraron al personal que labora en el lugar y llenaron los camiones de los cuales se tienen imágenes de las placas de dos de ellos.

Una vez que el propietario del ganado se percató del hurto, denunció los hechos a la Fiscalía y entregó las pruebas correspondientes, iniciando la autoridad las pesquisas para tratar de ubicar la ruta que siguieron los vehículos en los que fue trasladado el ganado.

De esta manera, se estableció que los camiones tuvieron como punto final el municipio de San Miguel Coatlinchán, en el Estado de México, donde los animales fueron bajados junto a un lavadero de unidades pesadas; allí, pretendían esconder el ganado robado.

La fiscalía de Tamaulipas estableció coordinación con sus homólogos del Estado de México, y de esta manera lograron la captura de los ladrones, además de recuperar 155 de las reses.

En la intimidad… En paz descanse, Julio César Almanza Armas.

davidcastellanost@hotmail.com
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