Tras una de las campañas más tensas y polarizadas en la historia de Estados Unidos, los 50 estados del país han implementado estrictas medidas de seguridad para las elecciones del 5 de noviembre. Para proteger la integridad de funcionarios y votantes, centenares de equipos de seguridad, drones, francotiradores, chalecos antibalas y botones de pánico estarán disponibles en centros de votación, anticipando posibles episodios de violencia.
El Departamento de Justicia ha confirmado el despliegue de observadores en 86 jurisdicciones dentro de 27 estados, incluyendo aquellos considerados clave para el resultado de los comicios. Este será el mayor número de observadores federales en la historia electoral de Estados Unidos.
La creciente polarización y los ecos del asalto al Capitolio en enero de 2021, cuando simpatizantes del expresidente Donald Trump interrumpieron la certificación de Joe Biden, han motivado a las autoridades a fortalecer la seguridad en esta elección. La policía del Capitolio, en previsión de situaciones similares, realizó recientemente un simulacro de evacuación con 12 helicópteros.
Refuerzos de seguridad en estados clave
La inversión en seguridad ha sido significativa, especialmente en estados como Arizona, donde en 2020 se registraron protestas violentas en el condado de Maricopa después de que Trump alegara, sin pruebas, haber ganado en la región. El secretario de Estado de Arizona, Adrian Fontes, aseguró que los centros de votación contarán con drones, francotiradores, detectores de metales y barreras físicas.
En algunos condados, los funcionarios electorales utilizarán chalecos antibalas y botones de pánico conectados al sistema de emergencias, algo sin precedentes en procesos electorales. Además, se ha capacitado a los trabajadores para enfrentar posibles escenarios de violencia, incluyendo simulacros de tiroteos y entrenamiento en técnicas de primeros auxilios y autodefensa.
Esfuerzos de organizaciones civiles
El Comité para unas Elecciones Seguras, una organización formada por expertos en administración electoral, ha distribuido guías de bolsillo con los puntos clave de las leyes electorales de cada estado. Estas guías buscan apoyar a quienes garantizarán la seguridad de la jornada ante posibles amenazas e intentos de intimidación.
La coordinación entre fuerzas locales y funcionarios electorales marca un esfuerzo sin precedentes para asegurar que los votantes puedan ejercer su derecho de forma segura y sin intimidaciones.
