José Gregorio Aguilar
A punto de cerrar el ciclo escolar, México enfrenta una realidad educativa que no puede ignorarse: el rezago académico aumentó del 10.7 por ciento al 11.6 por ciento, mientras más de 3.8 millones de niños, niñas y adolescentes siguen fuera de las aulas según lo revelan cifras más recientes del INEGI y diversos estudios recientes, que advierten sobre los desafíos persistentes para el sistema educativo nacional.
Durante este periodo, más de 33 millones de alumnos de preescolar a media superior cursaron estudios en todo el país, con el esfuerzo conjunto de directores, docentes y familias. Sin embargo, las cifras también muestran que, aunque la deserción en primaria es baja (0.1 por ciento), en secundaria alcanza el 2.9 por ciento y se eleva a 10.8 por ciento en la media superior.
Los bajos resultados en evaluaciones como la prueba PISA, en áreas como matemáticas y lectura, también reflejan un retroceso que preocupa a especialistas, declaró Carlos Aguirre Marín, integrante de la organización civil Suma x México.
A ello se suma un entorno escolar afectado por la violencia y el acoso. Según la ENADIS 2022, el 28 por ciento de los estudiantes de entre 12 y 17 años fueron víctimas de acoso escolar en el último año—lo que representa alrededor de 3.3 millones de adolescentes.
Ante este panorama, surge el movimiento “Suma x México”, que agrupa instituciones educativas, asociaciones sociales, culturales y voluntariado para impulsar soluciones desde las aulas. Han organizado tres encuentros nacionales y actividades como concursos de dibujo, torneos de matemáticas, olimpiadas del conocimiento y programas artísticos enfocados en la educación y la paz.
Con presencia ya en entidades como Jalisco, Chiapas, Guanajuato, Estado de México y Sonora, entre otras, el movimiento busca sumar fuerzas con autoridades federales, estatales y legislativas.
“La paz es posible en cada aula. Reducir el rezago y la deserción también lo es, si trabajamos juntos por la infancia y adolescencia de México”, subrayan sus voceros.
