Erik Huerta / TN
Altamira, Tamaulipas.– Entre lágrimas y con evidente desesperación, Gabriela acudió este martes a la Ciudad Judicial de Altamira para exigir la devolución de su hija, asegurando que la menor le fue arrebatada de manera violenta el pasado viernes.
De acuerdo con su testimonio, el padre de la niña, Alejandro “A”, llegó acompañado por abogados, un actuario y elementos de la Guardia Estatal para llevarse a la menor, pese a que ella afirma contar con la custodia legal otorgada por el Séptimo Juzgado de lo Familiar.
“Quiero a mi hija de vuelta. Lo que hicieron fue una atrocidad, inhumano. Todo se resolvió en un juicio oscuro e ilícito. La manera en que actuaron fue brutal”, expresó al borde del llanto, solicitando la intervención del DIF, la Federación Nacional de Mujeres (FENNAM) y organismos defensores de la niñez.
Gabriela, explicó que ha cumplido con las evaluaciones y requisitos establecidos por la autoridad judicial, mientras que el padre no se presentó a dichos procesos, lo que ocasionó la suspensión de su derecho de convivencia desde septiembre del año pasado.
“Esta lucha es por mi niña, a quien alejé de un ambiente inseguro. No he tenido noticias de ella desde que se la llevaron”, señaló.
La madre pidió la pronta actuación de las instancias competentes, al advertir que teme por la integridad de la menor y que su única exigencia es que sea restituida bajo su cuidado.
