Erik Huerta / TN
Altamira, Tamaulipas.- Al menos 60 vulcanizadoras ubicadas en Altamira, González y Aldama se encuentran bajo constante vigilancia de la Comisión Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios, ante el riesgo que representan los neumáticos abandonados durante la temporada de lluvias.
En estos establecimientos suelen acumular llantas en desuso, que al llenarse de agua se convierten en focos ideales para la proliferación de larvas del mosquito transmisor del dengue, enfermedad que ha registrado un incremento de casos en la región.
José Daniel Martínez Cano, responsable de Coepris de la Jurisdicción Sanitaria Número 12, detalló que este año ya se han emitido cerca de 20 apercibimientos a propietarios y encargados de vulcanizadoras, instándolos a desechar de forma adecuada los neumáticos para prevenir posibles brotes.
Advirtió además que los negocios reincidentes podrían ser clausurados temporalmente hasta que retiren por completo las llantas acumuladas, pues representan un riesgo latente para la salud pública.
