En una nueva jornada de audiencias sobre las amenazas mundiales a la seguridad nacional de Estados Unidos, el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), William Ratcliff, y el director del Buró Federal de Investigaciones (FBI), Kash Patel, defendieron la cooperación con el gobierno mexicano y resaltaron los resultados inmediatos en la lucha contra las drogas y la extradición de criminales.
Ratcliff subrayó la importancia de trabajar con el secretario mexicano de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, quien recientemente visitó Washington. “Hemos estado trabajando en eso a favor de nuestros países”, afirmó el director de la CIA, refiriéndose a los avances logrados durante las reuniones con el funcionario mexicano.
Por su parte, Patel destacó que uno de los primeros encuentros que sostuvo como director del FBI fue precisamente con García Harfuch, y recordó que como resultado de esa cooperación se han extraditado o expulsado de México a los 10 criminales más buscados por el FBI, además de otros 33 delincuentes.
En el mismo marco, el director del FBI reveló que desde la toma de posesión de Donald Trump, en enero, se han incautado 383 kilogramos de fentanilo ilegal, cantidad suficiente para matar a 29 millones de estadounidenses. Patel enfatizó que la amenaza del fentanilo no se resolverá únicamente combatiendo a los cárteles mexicanos, sino también enfrentando a los productores químicos en China, responsables de la producción de precursores utilizados en la fabricación de esta droga.
Mientras tanto, el demócrata de Texas, Joaquín Castro, cuestionó a la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, sobre la aparente incongruencia en el informe de amenazas a la seguridad nacional, al no mencionar al Tren de Aragua, grupo terrorista designado por Trump, a pesar de su vínculo con el gobierno de Nicolás Maduro. Gabbard respondió que existen “opiniones divergentes” sobre el tema.
Por último, el presidente del Comité de Inteligencia, Rick Crawford, expresó su preocupación por la falta de solidez en las evaluaciones de la comunidad de inteligencia, especialmente en lo referente al hemisferio occidental. Esta declaración no recibió respuesta durante la audiencia pública.
Tras la sesión, se llevó a cabo una reunión cerrada entre los miembros del comité y los jefes de espionaje estadounidense para abordar temas de inteligencia clasificada.
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