*El primer ministro canadiense defiende el papel del T-MEC en la fortaleza industrial de Norteamérica
El primer ministro de Canadá, Mark Carney, lanzó críticas al enfoque proteccionista del presidente estadounidense Donald Trump hacia la industria automotriz, al señalar que las economías de América del Norte están profundamente interconectadas y que esta integración es clave para mantener la competitividad de las fábricas en Estados Unidos.
Durante un encuentro con empresarios en Toronto, tras su reciente visita a Washington, Carney destacó que el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) fortalece el sector automotor estadounidense. “Si Estados Unidos quiere mantener su liderazgo global en la industria, necesita del T-MEC”, afirmó durante una conferencia organizada por el Banco de Montreal.
El mandatario canadiense reconoció que no todos en el gobierno estadounidense comparten esa visión, por lo que el tema sigue siendo motivo de debate.
Trump, quien firmó el T-MEC en su primer mandato, impuso recientemente aranceles a vehículos fabricados fuera de Estados Unidos, incluso a los ensamblados en Canadá y México, lo que ha generado tensiones y afectaciones en ambos lados de la frontera.
Durante la visita de Carney a la Casa Blanca, Trump calificó la situación como una “competencia natural” entre ambos países. “Él quiere fabricar autos, nosotros también, y tenemos la ventaja de un mercado enorme”, declaró el presidente estadounidense desde el Despacho Oval.
Sin embargo, las medidas arancelarias ya han tenido consecuencias: General Motors suspendió operaciones temporalmente en una planta canadiense y Stellantis NV redujo turnos en su fábrica de Windsor, Ontario, justo después de que se aplicaran los nuevos gravámenes.
El secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, insistió en que el objetivo de Washington es reducir la fabricación de autos fuera del país, aunque expertos advierten que romper la cadena de suministro integrada entre Canadá, México y EE.UU. sería extremadamente complicado.
Datos del Departamento de Comercio estadounidense muestran la magnitud de esa interdependencia: en 2024, Estados Unidos exportó 29,500 millones de dólares en autopartes a Canadá e importó 19,500 millones. Además, Canadá sigue siendo el principal comprador de autos estadounidenses, con adquisiciones por 23,200 millones de dólares, muy por encima de Alemania, que ocupa el segundo lugar.
Carney concluyó que las políticas comerciales de Trump han cambiado la relación bilateral de manera duradera. “Nuestra relación con Estados Unidos ya no será la misma”, advirtió.
INFORMACIÓN DE BLOOMBERG