Alfredo Guevara
El peor enemigo del Partido Revolucionario Institucional, desafortunadamente lo tiene dentro de la misma casa, donde desde el patio trasero, están usando a los de la misma familia para despojar de la presidencia del Comité Directivo Estatal EDGAR MELHEM SALINAS.
Sus principales enemigos, aunque en política dirán que no, son LUIS ENRIQUE ARREOLA VIDAL y ARTURO NÚÑEZ RUIZ.
Y decimos que es de la misma familia, toda vez que LUIS ENRIQUE es actual secretario general adjunto del CDE del PRI.
ARTURO es el coordinador del Movimiento Territorial, a quien por cierto, una de las áreas que ocupa el área del Comité Estatal, le fue habilitada como sus oficinas para que “despachara” como dirigente del MT, a las que habrá que decir sin tapujos, nunca asiste.
En el enredo también va el perpetuo secretario general de la Federación de Trabajadores de Tamaulipas EDMUNDO GARCÍA ROMÁN, “la peineta”, quien desde los tiempos en los que fungió como presidente del CDE del PRI RAMIRO RAMOS SALINAS hasta la fecha, no asiste a reuniones de trabajo convocadas por el Comité Estatal.
De hecho, quien asistía a dichas reuniones, con la representación de GARCÍA ROMÁN, lo era el profe RAMÓN HERNÁNDEZ MANRÍQUE (QEPD), entonces líder del Sindicato Micros Verdes en esta Capital del Estado, quien perdiera la vida en forma natural el pasado 28 de agosto del 2020.
En el grupo familiar discrepante va también el ahora regidor del Ayuntamiento de Tampico ROBERTO GONZÁLEZ BARBA.
Todos ellos son fuertes promotores para que el PRI tenga una alianza o coalición con partidos políticos como el PAN y PRD. Pareciera que andan desesperados por volverse a pegar a la ubre desde algún puesto de la administración estatal, de ganar esa unión de tres partidos políticos, producto del resultado de la misma negociación.
La historia nos dice que LUIS ENRIQUE ARREOLA levantó la mano para participar por la dirigencia estatal del PRI, luego de que se perdiera la elección de gobernador, cuyo candidato en ese entonces fue BALTASAR HINOJOSA OCHOA.
Tras la renuncia de RAFAEL GONZÁLEZ BENAVIDES a la dirigencia del PRI para hacerse cargo de la diputación en el Congreso local, por prelación subió la secretaria general como dirigente del Partido AIDA ZULEMA FLORES PEÑA.
Y fue precisamente LUIS ENRIQUE el primero en cuestionar la forma en que era conducida la dirigencia del partido y hasta llegó al uso de un discurso misógino, de violencia de género, contra la dirigente interina.
Al final de cuentas quedó como presidente del CDE SERGIO GUAJARDO MALDONADO, tras una fuerte competencia con OSCAR LUEBBERT GUTIERREZ.
Hoy, todo parece indicar que la consigna de LUIS ENRIQUE, ARTURO NÚÑEZ, GARCÍA ROMÁN, GONZÁLEZ BARBA y otros, no es tanto proponer la alianza o coalición entre el PRI, PAN y PRD, sino más bien, ir por la presidencia del CDE del PRI, para donde ya tienen también su propuesta. En fin.
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